Absceso intraabdominal
Un absceso intra abdominal corresponde a un acúmulo de secreciones purulentas o exudativas, que está compuesto de leucocitos, bacterias con tejido necrótico, y se encuentra más o menos bien localizado en la cavidad abdominal.[1] ClasificaciónExisten dos clasificaciones que se pueden utilizar, una es topográfica y la otra de órgano: Abscesos IntraperitonealesCorresponde a una clasificación de anatomía topográfica que se denomina según la región anatómica involucrada:
Este se puede presentar como secundario a cirugías diverticulares o enfermedad inflamatoria pélvica, perforación del apéndice o cirugías previas de colon.
Abscesos VisceralesCorresponde a una clasificación centrada en el órgano afectado:
Cuadro clínico (sintomatología)El cuadro clínico no es patognomónico de dicha alteración. Dolor o distensión abdominal Escalofríos Diarrea Inapetencia Náuseas Debilidad Etiología (causas)Ruptura de la apéndice o de un divertículo intestinal Infecciones parasitarias Trauma Cirugías abdominales previas Enfermedad inflamatoria intestinal[2] DiagnósticoSon varios los pasos que se deben dar para lograr el diagnóstico de un absceso intrabdominal.
Tratamiento
El drenaje se lleva a cabo introduciendo una aguja a través de la piel hasta el absceso, este procedimiento usualmente se lleva a cabo con la ayuda de rayos X.[4] El tubo de drenaje se deja días o semanas hasta que se desaparezca el absceso. Es importante tratar el foco causante del absceso y tratarlo adecuadamente.[5][6] ComplicacionesReaparición de un nuevo absceso Ruptura del absceso Infecciones generalizadas en el abdomen.[7] Diseminación de la infección por medio del torrente sanguíneo. Referencias
Bibliografía
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