Luego del subcampeonato mundial obtenido en 2002 y ganar su clasificación en el grupo 5 de la eliminatoria venciendo 3-0 a Escocia, Alemania confirmó su asistencia en la duodécima edición de la Eurocopa celebrada en el país ibérico, Portugal. Pese a las altas expectativas la selección no logró avanzar a la segunda fase por segunda vez consecutiva como en la edición pasada. Fue asignada en el grupo D, su debut se dio el 15 de junio en el Estádio do Dragão de Oporto, en dicho compromiso empató con la selección de Países Bajos por 1-1, Torsten Frings al 30 marcó la victoria parcial, pero al minuto 81 el neerlandés Ruud van Nistelrooy igualó el encuentro.[1]
En el segundo disputado el 19 de junio en el Estádio do Bessa XXI de Oporto, ante Letonia el combinado germano no logró concretar su primera victoria, empatando sin goles.[2]
El último partido fue celebrado el 23 de junio en el Estádio José Alvalade de Lisboa, por lo tanto en —el duelo decisivo— cayó por 1-2 ante la selección checa, el centrocampista Michael Ballack al 21 marcaba el gol de la clasificación a los cuartos de final, pero los checos remontaron el marcador con anotaciones de Heinz al 30 y Baroš al 77; así el combinado nacional sumó otro fracaso internacional.[3] Luego de dicho fracaso, Rudi Völler dimitió del puesto de entrenador.[4]
↑Toni Terrades Martí (16 de junio de 2004). «Pobre espectáculo en Oporto». Página oficial de la UEFA. Archivado desde el original el 18 de septiembre de 2016. Consultado el 16 de julio de 2016.
↑Toni Terrades Martí (20 de junio de 2004). «Sin recursos ante la cenicienta». Página oficial de la UEFA. Archivado desde el original el 18 de septiembre de 2016. Consultado el 16 de julio de 2016.
↑«Otro histórico eliminado». Página oficial de la UEFA. 24 de junio de 2004. Archivado desde el original el 18 de septiembre de 2016. Consultado el 16 de julio de 2016.