Corresponsalía bancariaLa corresponsalía bancaria es el conjunto de los acuerdos bajo los cuales un banco, el banco corresponsal o intermediario (correspondent bank, en inglés), mantiene depósitos en propiedad de otro banco, el banco respondiente o emisor (respondent bank, en inglés), y con los que provee de pagos y otros servicios.[1] De manera más formal:[1]
Estos acuerdos han establecido una red de internacional de relaciones de corresponsalía que ha conformado el sistema actual de banca de corresponsales, necesario para un rápido y efectivo funcionamiento de los sistemas de pago.[2] Al permitir una transferencia, una entidad corresponsal deduce la cantidad de la cuenta del banco origen de la transferencia, generalmente en moneda local, y lo incorpora a la cuenta del banco receptor, habitualmente en dólares o euros, cobrando una comisión por este servicio.[3] De esta forma, el pequeño banco cambia una moneda local más débil al poderoso dólar, abriéndole a su vez más oportunidades de negocios.[3] MotivaciónLa necesidad de la banca de corresponsales nace cuando una entidad financiera necesita prestar un servicio en un tercer país en el que no tiene presencia física o en el que, teniendo presencia física, no tiene acceso al sistema de pagos de su moneda.[2] Para ello, contacta con una institución financiera de dicho país y llega a un acuerdo de corresponsalía bancaria. Cuenta corresponsalUna cuenta corresponsal es una cuenta establecida por una institución financiera para recibir depósitos, hacer pagos o manejar otras transacciones financieras para otra institución financiera. Una cuenta corresponsal se establece a través de un acuerdo bilateral de corresponsalía bancaria entre los dos bancos.[cita requerida] Randy A., Trabaja... EjemploUna compañía petrolera es un cliente de ING en Ámsterdam, y vende 500,000 barriles de petróleo por 40 millones de dólares a una compañía la cual es cliente de Credit Suisse. ING Amsterdam mantiene sus dólares en Bank of America y Credit Suisse mantiene sus dólares en The Bank of New York Mellon. Cuando la compañía cliente le indica a Credit Suisse que pague, Credit Suisse carga la cuenta del comerciante y transfiere dólares de su cuenta corresponsal en The Bank of New York Mellon a la cuenta de ING en Bank of America. Luego, ING acredita los dólares a la cuenta en dólares de la compañía petrolera en Ámsterdam. RegulaciónLa corresponsalía bancaria ha sido una herramienta habitual en el lavado de dinero debido a que permite convertir capital en moneda local en dólares o euros a partir de un banco local corresponsal de otro internacional que a cambio de importantes comisiones le da acceso a monedas internacionales.[3] Por ejemplo, JP Morgan estuvo implicado en el lavado de dinero proveniente de la corrupción del expresidente ucraniano Víktor Yanukóvich,[4] Standard Chartered Bank estuvo implicado en el lavado de dinero de capital iraní bajo sanción de Estados Unidos[3][5] o CaixaBank estuvo relacionada en el lavado de dinero de la mafia china[6][3] Por esta razón, algunos países prohibieron a las entidades financieras tener relaciones de corresponsalía con ciertos tipos de entidades bancarias y se obligó a que las entidades financieras comunicaran a la Unidad de Inteligencia Financiera las actividades sospechosas en relaciones de corresponsalía.[cita requerida] En 2001, el Comité de Basilea recomendaba a los bancos que “se negaran a entablar o proseguir ningún tipo de relación de corresponsalía bancaria con banco fantasma situados en jurisdicciones foráneas”.[7] La Ley USA PATRIOT, en su sección 313, prohíbe a instituciones financieras tener relaciones de corresponsalía bancaria con bancos fantasma y requiere a las instituciones financieras asegurarse en sus relaciones de corresponsalía que proveen a bancos extranjeros que no están proporcionando servicios a bancos bancos fantasma.[8] La sección 312 de la Ley USA PATRIOT exigió que cada institución financiera estadounidense que establezca, mantenga, administre o gestione una cuenta corresponsal en los Estados Unidos para una institución financiera extranjera tome ciertas medidas contra el lavado de dinero para dichas cuentas.[9] El 4 de enero de 2006, la FinCEN publicó un reglamento definitivo (31 CFR 103.176) que implementa las disposiciones de debida diligencia contra el lavado de dinero.[9] Posteriormente, el 9 de agosto de 2007, publicó una enmienda para ese reglamento definitivo que implementa las disposiciones de debida diligencia contra el lavado de dinero especial con respecto a las cuentas corresponsales establecidas o mantenidas para:[9]
Referencias
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