En la época de su nacimiento el Reino de Nápoles estaba envuelto en guerra: poco después de la muerte de su abuelo Alfonso V en 1458, su padre había tenido que enfrentar la rebelión de los grandes barones napolitanos y el desembarco de las tropas del pretendiente francés al trono Jean de Anjou.
Francesco fue educado en la corte bajo la tutela de Antonio di Sessa y de Rutilio Zeno, y mantuvo estrecho contacto con Diomede Carafa, que fue para él una gran influencia.[3]
A los quince años de edad, en 1476 se embarcó en Manfredonia en dirección a Hungría acompañando a su hermana Beatrice, que viajaba a aquel reino para su matrimonio con el rey Matías Corvino; poco después se unió a ellos su hermano Giovanni, que había sido nombrado arzobispo de Estergom.
Francesco pasó los siguientes ocho años de su vida en Hungría; bien considerado por el rey, formó parte de su cancillería mientras se instruía en el arte militar y en la cultura humanista de su tiempo.[4]
Fue durante su estancia allí cuando se concertó su matrimonio con Isabella, hija del príncipe de Altamura Pirro del Balzo, en un intento por atraer al príncipe a la fidelidad a la corona y por asegurar que tras su muerte sus feudos revirtieran a la Casa de Aragón.[3]
Regreso a Nápoles
En agosto de 1484 Francesco regresó a Nápoles.[5][6]
En los años anteriores el rey Ferdinando y su hijo Alfonso habían practicado una política centralizadora para aminorar el poder de los barones feudales y habían cargado a todo el reino con unos impuestos excesivos; las relaciones con Roma tampoco eran buenas, pues el rey se obstinaba en no pagar el censo debido a la Santa Sede,[a] en usurpar su autoridad para el nombramiento de prelados y en imponer tributos al clero, y ahora el papa Inocencio VIII y los barones napolitanos hacían causa común en una guerra inminente.[7][8]
En diciembre Francesco viajó a Roma junto a su hermano Giovanni y al cardenal Ascanio Sforza para representar una embajada de reconciliación con el papa, que no consiguió los objetivos buscados.[9]
Abiertas las hostilidades, en mayo de 1485 fue nombrado lugarteniente general del rey en los Abruzos, duque de Monte Sant'Angelo y marqués de Bisceglie, y fue enviado a Apulia para enfrentarse a su futuro suegro Pirro del Balzo, aunque no fue capaz de impedir la toma de Rutigliano por los rebeldes y la difusión de la rebelión. El año siguiente regresó al frente de siete escuadras para proseguir las acciones militares.[10][11]
Murió en octubre de 1486 a los veinticuatro años de edad de una enfermedad pulmonar durante el transcurso de la campaña militar, antes de haber celebrado su matrimonio. Fue sepultado en la iglesia de Monteoliveto.[12][13][14][15][16]
Notas
↑El Reino de Nápoles era feudatario de los Estados Pontificios y estaba obligado al pago de una cantidad anual.
↑Cuartelado, primero y cuarto, palos de oro y de gules de ocho piezas, que son de Aragón; segundo y tercero, terciado en palo: primero, fajas de plata y de gules de ocho piezas, que son de la antigua Hungría: segundo, de azursembrado de flores de lis de oro al lambel de gules de tres pendientes, que es de Anjou-Sicilia; tercero, de plata, a una cruz potenzada de oro cantonada de cuatro crucetas de lo mismo, que es de Jerusalén.
Fuscolillo, Gaspare (1876). «Le Cronache de li antiqui Re del Regno di Napoli». En Capasso, Bartolomeo, ed. Archivio Storico per le Province Napoletane(en italiano) (Palermo) I: 35-81, 533-564, 621-648.