La Oficina Nacional de Emergencia del Ministerio del Interior[2] fue un organismo de carácter público chileno creada bajo el periodo de Dictadura, a través del decreto con fuerza de ley N°369 del año 1974, Fue dependiente del Ministerio del Interior de Chile, que tenía por principal finalidad poder coordinar, manejar, y planificar los recursos públicos y privados que estaban destinados a la prevención y atención de emergencias y desastres de origen natural o provocados por la misma acción humana, proporcionando a los ministerios, delegaciones, gobernaciones, municipios y organismos de protección civil de nivel nacional, regional, provincial y comunal, modelos y planes de gestión permanente para la prevención y manejo de catástrofes, desastres, y emergencias, tales como por ejemplo sismos, temporales, aluviones, erupciones volcánicas, incendios y sequías.[3] Su último director nacional interino fue Mauricio Tapia Dupuy, quien ejerció el cargo de la entidad desde el 21 de noviembre del año 2022, hasta el 1 de enero del año 2023, y bajo el gobierno de presidenteGabriel Boric Font.[4]
Fue la institución encargada también de poder coordinar las medidas educativas preventivas. Sus labores más destacadas se enmarcaron dentro del denominado Plan Integral de Seguridad Escolar, y los planes de evacuación en posible caso de un tsunami o terremoto.[3]
El 1 de junio de 1971, durante el gobierno de Salvador Allende, fue promulgado el decreto 737 que creaba la Oficina Coordinadora de Emergencia del Ministerio del Interior, que consistía en un comité compuesto por representantes del Ministerio del Interior, del Estado Mayor de la Defensa Nacional, de la Dirección General de Carabineros y del Servicio Nacional de Salud.[8]
Con la dictación del decreto con fuerza de ley N°369 del año 1974, la nueva Oficina Nacional de Emergencia (Onemi) asumió las funciones de la Oficina Coordinadora de Emergencia. En 1983 se establecieron los primeros estatutos orgánicos de la Onemi, por un decreto supremo con fuerza de ley que fue promulgado por el ministerio del Interior de Chile N°509.[9]
contaba con 14 teléfonos satelitales comprados en 2008, pero que no estaban inventariados ni habilitados para el día de la catástrofe
compra de artículos de emergencia sin respaldo, facturas ilegibles o avaladas solo por una fotocopia y falta de control en el almacenaje de ayuda para damnificados
alimentos vencidos y carpas, toldos, sillas de ruedas y sacos de dormir sin distribuir, con una data de casi 20 años
la Onemi debió exigir documentos de respaldo para compras aun cuando estas se realizan por orden de Comité de Emergencia Presidencial
la Onemi aceptó la recepción de bienes según guías de despacho con firmas ilegibles, sin indicación del lugar de recepción, nombre y cargo de quien recibe, ni la fecha y timbre institucional, presentándose falta de uniformidad e imprecisiones en el procedimiento de pago
"Las instituciones que debieron haber orientado oportunamente, informado y protegido a nuestra población no estuvieron a la altura de las circunstancias. Estaban a ciegas, desinformadas, descoordinadas, y no cumplieron con su deber cuando el país más las necesitó".
La misión principal del organismo fue coordinar, organizar, asesorar y supervisar las actividades del Sistema Nacional de Protección Civil para reducir el riesgo de desastres a través de la mitigación, preparación, alerta, respuesta y rehabilitación con el objeto de reducir la pérdida de vidas, disminuir los impactos económicos, los efectos medioambientales y proteger los modos de vida, contribuyendo al desarrollo sostenible.[15]
Por otro lado, la visión futura es, que hacia el año 2030, el órgano posea una institucionalidad y servicio robusto, que permita establecer la reducción del riesgo de desastres como prioridad nacional, fomentando una cultura preventiva para contribuir al desarrollo sostenible.[15]
Focos estratégicos
Cultura preventiva: es el resultado de la gestión de Onemi y el Sinapred en el proceso de educar, crear conciencia y adoptar conductas responsables en la ciudadanía para reducir el riesgo de desastres, evitar crear riesgo y disminuir el impacto de los desastres.[15]
Confianza y cercanía: se orienta a fortalecer la interacción y comunicación con la comunidad, permitiendo a la organización mejorar la calidad de servicio, promover la corresponsabilidad en reducir el riesgo de desastre y lograr una mayor confianza en la población.[15]
Agilidad organizacional: lograr una integración y optimización de los procesos de la institución, bajo el prisma del uso de la tecnología e innovación como componentes facilitadores en la entrega de un mejor servicio a la comunidad.[15]
Organización
Se encontraba subdividida en oficinas regionales, provinciales y comunales. El cargo de director nacional era ocupado por concurso público, que era conocido como Sistema de Alta Dirección Pública, Algunas de sus divisiones más importantes eran las siguientes:[16]
↑Entre del 9 de mayo y el 8 de noviembre de 2006,[21] ocupó el cargo en calidad de interina, siendo ratificada en esa última fecha,[22] hasta el 10 de marzo de 2010.
↑Entre el 11 de marzo[23] y el 27 de diciembre de 2010, ocupó el cargo en calidad de interino, siendo ratificado en esa última fecha,[24] hasta el 1 de febrero de 2012.[25]
↑Ocupó el cargo de manera interina debido a la salida de Ricardo Toro, hasta la disolución de la ONEMI, el 1 de enero de 2023 asumió como director interino del nuevo organismo Senapred, el cual reemplazó a la ONEMI
↑Ministerio del Interior (15 de junio de 1971). «Decreto 737, designa Comisión que indica». Diario Oficial de la República de Chile. p. 1. Consultado el 20 de noviembre de 2023.
↑Biblioteca del Congreso Nacional de Chile (11 de noviembre de 1983). «Decreto Supremo Nº 509». Consultado el 16 de noviembre de 2022.