En 2014 trasladó su laboratorio al King's College de Londres, donde es profesora de neurobiología del desarrollo y ha continuado su trabajo sobre los mecanismos de formación de circuitos corticales.[1] En los últimos años, su laboratorio ha destacado la importancia de los circuitos corticales gabaérgicos en la función cognitiva y su papel potencial en las patologías neurológicas, especialmente la esquizofrenia.[3][4] Su equipo descubrió un vínculo entre la proteína llamada Brevican y la memoria espacial a corto plazo.[5] Según un estudio realizado por ellos, «Al modular los niveles de Brevican, la experiencia introduce modificaciones moleculares y celulares precisas en las células PV+ que se requieren para el aprendizaje y la memoria».[6][7] En 2019, Rico Lab descubrió un mecanismo de desarrollo para especificación de conexiones inhibitorias dentro del cerebro. Rico trabajó con Emilia Favuzzi y Ruben Deogracias, quienes fueron los autores principales del artículo de Science sobre este descubrimiento.[5][8]
Premios y honores
En 2010, el trabajo de Rico recibió el reconocimiento de la Organización Europea de Biología Molecular (EMBO).[9] Además, recibió las becas Consolidator y Advanced del Consejo Europeo de Investigación por su proyecto 'Ensamblaje y plasticidad de redes corticales inhibidoras por experiencia de aprendizaje temprano'.[9][10] Esta subvención se otorgó a Rico para investigar cómo las experiencias sensoriales tempranas afectan la eficiencia de las redes corticales y, en última instancia, el comportamiento.[3] Rico recibió una beca de investigación de Wellcome,[11] y se le otorgó membresía de por vida a la comunidad de científicos de EMBO en 2021.[12]
Referencias
↑ abcRibic, Adema (17 de septiembre de 2021). «Episode 11: Beatriz Rico, PhD». Conjugate: Illustration and Science Blog(en inglés). Consultado el 29 de noviembre de 2021.